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El arte de etiquetar
Etiquetar un producto no es solo informar de la marca, la talla o el precio de una prenda. Más allá de la función de identificación, el etiquetaje contribuye a mejorar la presentación del producto en el punto de venta, aportando valores diferenciales como: la elegancia, la creatividad, la innovación o incluso la sostenibilidad. Existen diferentes tipologías de etiquetado en función de la naturaleza del producto, negocio y estrategia de venta. En el artículo de hoy repasamos tipos, beneficios y oportunidades del etiquetaje textil.
¿Cómo escoger el sistema de etiquetaje para mi ropa?
Hoy en día, el mercado ofrece diversos sistemas para etiquetar tus prendas. Dependiendo de las características de la ropa o negocio, podrás escoger entre un sistema u otro.
Máquinas de navetes
Las máquinas automatizadas de navetes son una herramienta clásica y esencial en un proceso de producción a gran escala propio de la industria textil. Se trata de máquinas de navetes precisas y fáciles de emplear que permiten un etiquetado de las prendas uniforme, rápido y efectivo. Invertir en máquinas de calidad favorece la optimización de tus procesos de trabajo y ofrece un resultado más homogéneo y profesional.
Los navetes son accesorios de plástico para el etiquetaje, resistentes y versátiles, constan de dos topes unidos por un hilo fino. Soportan la etiqueta en la prenda de manera segura y práctica. El modelo de navete estándar es apto para todo tipo de tejidos y complementos, mientras que los navetes finos están destinados a tejidos más delicados o artículos de pequeñas dimensiones. Lo más recomendable es emplear el modelo de navete más adecuado a las características del producto, escogiendo el color y el grosor, intentando crear un resultado armónico e integrado.
Etiqueta manual
Muchos diseñadores eligen para sus colecciones un etiquetado artesanal que añada a sus prendas valores de calidad, autenticidad o ecología. En estos casos, el proceso de trabajo es a mano, etiquetando los artículos uno a uno, lo que implica un esfuerzo y dedicación de tiempo mayor por parte del profesional dedicado. El etiquetado manual es idóneo cuando la naturaleza del producto requiere una mayor atención al detalle, como en el caso de prendas exclusivas, de alto coste o pertenecientes a colecciones especiales o limitadas.
Cuando se emplean etiquetas manuales, es frecuente hacer uso de marchamos personalizados con el logo distintivo de la marca.
Se trata de una etiqueta o sello que personaliza el producto destacando alguna cualidad o remarcando la autenticidad y originalidad de la marca. Puede optarse por la opción de marchamo de cordón realizado en textil de algodón o poliéster.
El mercado ofrece modelos de diversos colores y medidas, con intención de customizar al máximo con el producto.
Soluciones de etiquetaje creativas
Todos los elementos que envuelven y acompañan el producto, forman parte esencial de su atractivo y valor. Entre esos elementos están las etiquetas que integran la marca y que contiene la información básica para el consumidor. Una etiqueta original, realizada con materiales específicos como papel o cartón reciclado, que aporte un diseño o mensaje diferenciador, expresará mensajes beneficiosos del producto y será valorado por el cliente final, como un gesto innovador. Por tanto, la etiqueta es una herramienta fundamental de la estrategia de marketing de las empresas que se debe de cuidar.
Otras tendencias en etiquetaje son aquellas que incorporan telas o cordones de mayor grosor o cromatismo, papeles o cartones especiales, etiquetas desmontables, etiquetas termoadhesivas e incluso etiquetas ecológicas fabricadas con elementos naturales con semillas o componentes orgánicos que aportan un uso posterior más allá de su función de etiquetado.
El uso cromático de las etiquetas, de con acuerdo a los criterios de clasificación de las prendas, aporta a los puntos de venta un resultado práctico y estético, permitiendo a los clientes diferenciar modelos o tallajes. Por ejemplo, etiquetas específicas para colecciones de hombre, mujer, infantil, baño, deporte, tallas especiales o rebajas. Las firmas se benefician de las posibilidades de codificación de las etiquetas para expresar mensajes de interés comercial como en el caso de las rebajas, nuevas temporadas o promociones especiales.
En definitiva, el buen uso del etiqueta mejora la buena imagen tanto de las marcas como de los puntos de venta donde se comercializan, optimizando la experiencia del cliente y su percepción de satisfacción tras el proceso de compra.
Tendencias en etiquetaje
Una de las tendencias más destacada en etiquetaje es el minimalismo, que se refiere a la consecución de la máxima integración de la etiqueta con el producto. Es el caso de las etiquetas de vinilo, etiquetas invisibles o termoadhesivas, que favorecen una estética cuidada, limpia y moderna, aportando la información de manera elegante y discreta. Esta tendencia es especialmente empleada por las firmas de lujo, que pretenden con este gesto, conferir el máximo protagonismo a la prenda frente a cualquier otro elemento externo.
En resumen, un buen etiquetaje es, a menudo, la mejor estrategia de venta de un producto. No solo permite hablar sobre él sino ayuda a contar una bonita historia acerca de sus valores y rasgos de personalidad. Por ello, la elección de proceso y elementos que integran el etiquetaje debe de ser coherente y cuidadosa con los propósitos de la marca.
¿Estás de acuerdo con el contenido de este artículo? ¿te gustaría recibir más información relacionada con los sistemas de etiquetaje de prendas textiles o cualquier otro producto? Escríbenos sin compromiso a soltronic@soltronic.es, y estaremos encantados de asesorarte.
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