Moda bajo demanda

Produce lo que vendes:
El fenómeno de la moda por encargo.

Las cifras hablan. El 20% de la ropa fabricada no se vende. Un excedente productivo que acaba en vertederos y supone un impacto ambiental absolutamente inaceptable. Ante esta situación, muchas firmas de moda dirigen su mirada hacia nuevos modelos de producción bajo demanda, que permitan testar los gustos del consumidor mediante pequeñas producciones hechas por encargo. Hoy, hablamos del fenómeno que está revolucionando el mundo de la moda: la producción bajo demanda.

Menos stock, menos gasto, más personalización

La producción bajo demanda no es un invento tan novedoso como pensamos. Si recordamos el origen de la alta costura, se trataba justamente de eso. Pedidos personalizados y exclusivos, que se realizaban a medida, por encargo del cliente. La gran diferencia con respecto a nuestros días es la intervención de las nuevas tecnologías. Hoy, la existencia de sofisticados programas informáticos permite diseñar y crear prendas basadas en algoritmos de búsqueda creados en base a los deseos del consumidor. De esta forma, es posible trazar pedidos que respondan a los gustos y tendencias del mercado, garantizando un resultado más exitoso y sostenible.

“Muchas firmas de moda digitales ya han nacido con una propuesta de producción bajo demanda. De esa forma, no solo reducen costes y stock, sino que además se aseguran de satisfacer los gustos de sus clientes mediante prendas personalizadas y exclusivas”

Todos conocemos el impacto del modelo “fast fashion” sobre el planeta. La fabricación de grandes volúmenes de prendas, que requieren altos niveles de recursos y que ocasionan importantes daños al planeta durante su proceso de elaboración. Por si fuera poco, diseñar de acuerdo con las expectativas del mercado, no es garantía de éxito. Muchos diseños siguen produciéndose por inercia y llenando los lineales de las tiendas durante muchos años, pese a ser un modelo absolutamente ineficaz. Fabricar bajo pedido supone fabricar únicamente aquellos pedidos que se han encargado de manera previa, evitando acumular un stock excesivo. Se trata de una evolución natural del clásico atelier pero con precios más asequibles y las facilidades que proporcionan las nuevas tecnologías digitales.

Así son las nuevas marcas que triunfan en internet

Existen numerosos ejemplos de firmas que nacieron, o se han adaptado después, en este nuevo modelo productivo. Entre los casos más célebres: la marca de moda francesa; Maison Cléo, uno de los referentes más célebres de este fenómeno. Su página web abre su tienda al público los miércoles a las seis y media durante solo cinco minutos. Únicamente aceptan un número limitado de pedidos y hacen esperar a los clientes hasta la entrega del artículo, aumentando el grado de deseo y expectación. Andión es otra de las marcas de referencia. La firma gallega se dio a conocer mediante las redes sociales y pronto acaparó la atención de los medios. Su filosofía se basa en trabajar con material excedente de otras producciones. Por eso, las pocas unidades producidas son muy codiciadas por sus consumidores. Paynter produce solo tres modelos de chaqueta al año y solo inicia la producción si se alcanza un número de pedidos suficientes. Loewe permite personalizar algunos modelos de sus bolsos; escoger el tipo de piel, asas y decoraciones metálicas, y hasta el color entre una paleta de 17 tonos.

“Comprar de manera personalizada y esperar los tiempos de entrega, implica una nueva forma de consumir más racional y responsable”

La start-up Unmade es uno de los jugadores principales en este nuevo mercado. Ellos son los responsables de los sofisticados programas informáticos que dan servicio a grandes marcas como New Balance o la firma ciclista; Rapha. “Nike by you” es otra plataforma que permite customizar los modelos y producirlos por encargo, conectando los pedidos del cliente con los proveedores que los fabrican. Olivia Rose The Label solo acepta pedidos en su tienda online dos veces al mes. Cada prenda se confecciona tras formalizar el pedido, escogiendo las telas adecuadas y adaptándose a cada talla. La mayor parte de estas marcas, realizan colecciones cápsula para otras firmas, y de esta forma, pueden asumir con eficacia cantidades reducidas. Otros casos de éxito son Becomely, creadores de vestidos y pendientes por encargo mediante impresora 3D o Anhet, que ofrecen modelos de prendas y complementos exclusivos y numerados, elaborados con telas en desuso.

¿Qué opinas de este nuevo modelo de producción? ¿Consideras que es una tendencia con futuro en la industria de la moda? Comparte enviándonos tu comentario a soltronic@soltronic.es